miércoles, 23 de octubre de 2013

Leonardo y Miguel Ángel, los artistas genios



En el siglo XV Italia surgió lo que conocemos como el Renacimiento, después de la época oscura de la Edad Media se dio la era de la luz, es decir, fue la época de los avances en el campo de la pintura, científico, medicina e ingenieria. Artistas famosos hubo dos que marcaron la época estos se llamaban: Leonardo Da Vinci y Miguel Ángel Buonarroti, siendo creadores de algunas de las obras más icónicas e impactantes que el mundo haya visto.

Da Vinci era pintor, escultor, arquitecto, científico e ingeniero, lo que contrasta al artista tradicional que hace solamente pinturas. Su fama como artista se debe en parte a su pintura más importante “la Mona Lisa”, pero fueron sus estudios en la anatomía humana los que lo hicieron importante en el área de medicina, ya que fue el primero en estudiar el cuerpo humano a partir de cadáveres y hacer bocetos detallados de éstos, plasmando cada órgano y cada parte. Sus ilustraciones fueron la base de investigaciones científicas e hizo la proporción divina, que consistía en combinar las matemáticas con la naturaleza. Un claro ejemplo es el “hombre de Vitruvio”, el cual está perfectamente proporcionado. Al ser considerado un arquitecto se le asignó hacer el Domo de Milán y gracias a esto inventó algo muy importante: los planos.

En sus últimos años de vida contribuyó a la fabricación de maquinas de guerra, las cuales nunca se hicieron realmente pero sirvieron de antecedentes de las actuales. Por ejemplo, el carro blindado de Da Vinci que consistía en una coraza de metal y cañones que asimila los tanques de guerra de hoy en día.
Miguel Ángel fue un escultor, pintor y arquitecto mas conocido por sus obras : “El David”,  la bóveda de la Capilla Sixtina y el domo de San Pedro. Su primer maestro, Domenico Guirmandalo, el cual le enseñó diversas técnicas de pintura, preparación y molida de fresco. Su primer mecenas fue Lorenzo de Medici, líder de la familia Medici (una de las mas ricas y poderosas de Florencia), tambien conocido como Lorenzo “El Magnífico”. La vida de Miguel Ángel fue conflictiva, ya que desde contra edad sufrió la perdida de su madre, la desaprobación de su padre hacía su carrera, su homosexualidad, el tabú de las esculturas de desnudos, entre diversos eventos clave como una pelea que le desfiguró la nariz y originó su obsesión a la belleza.

La creación del “David” fue un reto, la dificultad para mover la pieza entera de marmól de tonelada y media, así como la textura. La capilla sixtina a su vez fue el reto más grande que Miguel Ángel tuvo que afrontar, sobre todo por la rivalidad que tuvo con el Papa y con otro artista llamado Bramante quien explico al Papa que Miguel Ángel no tenía el talento necesario para hacer una pintura de esa magnitud.  Miguel Ángel recordó las técnicas aprendidas con su primer maestro, Domenico Ghirlandaio. El fresco es la técnica más difícil que hay ya que se debe pintar todo mientras está húmedo. Miguel Ángel concluyó su obra pero le costo su salud, casi queda ciego por el polvo del yeso y su columna se deformó por la posición en la que tenía que pintar. No hay duda que esta pintura es una de las más famosas que hay, miles de gentes visitan el Vaticano para admirar esta obra de arte. Al igual que el mural llamado el Juicio Final que está en la pared derecha de la Capilla Sixtina.

No hay duda que estos dos artistas fueron genios en la pintura aunque su sed de conocimiento y perfección los llevo a hacer obras que ningún hombre ha podido hacer jamás.

No hay comentarios:

Publicar un comentario